Ritual de liberación con círculo de fuego azul

Cuando expandimos nuestra práctica de autoindagación y desarrollo personal, en muchas ocasiones nos encontramos con experiencias que aparentemente pueden parecer algo complejas de transitar. Al atravesar estas situaciones que nos presenta la vida, nuestra práctica espiritual puede verse afectada por nuestro estado mental/emocional. Cuando esto ocurre, podemos sufrir desbalances energéticos que favorezcan la acumulación de energía densa en nuestro cuerpo. Es por eso que hace falta que constantemente estemos purificando y limpiando nuestra energía, para que podamos vivír lo que el universo nos muestra desde una perspectiva de paz y armonía . Existe desde tiempos muy antiguos una práctica que nos ayuda a mantener nuestra vibración muy alta, conectados de forma plena al torrente de energía divina. Se trata de la práctica del fuego azul, un ritual que nos favorece alcanzar la conciencia superior a la que los sabios hebreos llamaron los 72 nombres de Dios. Su energía de alta dimensión penetra en los participantes del círculo, favoreciendo un periodo de elevación de espiritual que puede prolongarse por todo un año. Después del ritual el círculo queda activo por un largo periodo, como un tubo de luz que nos aleja de las experiencias densas o tóxicas. Los sabios, iluminados, arcángeles, maestros ascendidos, espíritus guía… Se proyectan en nuestro camino para que nuestro futuro esté bendecido por la luz del cielo. Este es un bien que merece todo ser vivo por derecho y legado divino.