¿Crees en la reencarnación? Símbolo mágico Hon Sha Ze Sho Nen.
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¿Crees en la reencarnación? Símbolo mágico Hon Sha Ze Sho Nen.

Actualizado: 11 may 2023


Bardo, en Tibetano significa "estado intermedio" (entre la muerte y la próxima vida). Se cree que en este estado está presente la conciencia, como cuando estás saliendo del periodo de ensoñación y te despiertas al comenzar la mañana. En ese momento puedes ser un ser consciente, pero todavía vacío de ego, vacío de juicios...


En los sutras tibetanos se encuentra el uso y significado tradicional de un hermoso símbolo, Hon Sha Ze Sho Nen que los monjes aplicaban a los hombres y mujeres que habían muerto recientemente pero también a los que llamaban "muertos en vida" (seres que habían olvidado quienes eran), para ayudar a la evolución del alma hacia el Dharma (camino de la felicidad).




El símbolo significa trazo por trazo...


Los mensajes del cielo bajan a la tierra a través de la conciencia de la humanidad de dos formas:


A través del Dharma (consecuencias positivas de las acciones nobles de los seres sanos) como ejemplo del camino que debían tomar conscientemente las almas para alcanzar la felicidad. A través del Kharma (consecuencias negativas de las reacciones sufrientes de los seres enfermos) como ejemplo del camino que escogían inconscientemente las almas que vivían en la desdicha.


En los sufras tibetanos, también llamados Tantras, los hombres enfermos, eran los no habían encontrado el camino del Dharma, y seguían reaccionando a sus emociones, a situaciones externas o a la existencia con temor y rechazo... A esto llamaron el infierno en la Tierra. Así les llamaron "Las almas jóvenes" que tras su enfermedad y su muerte, volverán a encarnar para continuar con sus lecciones en este, el planeta escuela y mejorar a cada encarnación en su búsqueda de la felicidad...




Los hombres sanos, son para ellos los maestros, que tras muchas vidas de karma, desdicha y reacción a sus intintos agresivos, aprendieron a no reaccionar para vivir en Dharma, en aceptación, amor y felicidad, trayendo vida tras vida, el cielo a la tierra con su vibración.


Estos, cuentan, que servirán vida tras vida con su ejemplo, de ayuda a los enfermos (a las almas más jóvenes) para que puedan volver encontrar el camino a la felicidad (o el paraíso terrenal), hasta que el último hombre sobre la tierra alcance la felicidad y entonces toda la humanidad, pueda elevarse a un cielo permanente...
















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